domingo, 24 de febrero de 2019

SAN ANSELMO, ORACION PARA SANACIÓN DE ENFERMOS DE CUERPO Y ALMA


ORACIÓN
 
Glorioso San Anselmo,
bienaventurado pastor de almas
siempre favoreciste a los más débiles,
y de un modo más especial
a los enfermos y peregrinos.
 
Baluarte de la cultura,
nunca dejaste en el abandono
a tus hermanos más infelices,
los mas pobres y necesitados,
a quienes dabas cobijo y alimento
y cuidabas sus enfermedades y miserias.


Por todo ello, gozas hoy,
de la predilección de Nuestro Señor
en el Reino de los Cielos,
y acudo a ti para solicitar tu intercesión
ante Él, Dios Padre Celestial,
para pedir sanación de todas mis heridas,
tanto físicas como espirituales.
 
Ayúdame santo mío,
cura mi cuerpo y mi alma,
porque me embarga la aflicción
entre tanto dolor y amargura.
 
Devuélveme la salud,
alivia mis penas y congojas,
y favoréceme para que bajo tu protección
pueda recobrar la felicidad en mi vida,
 darte gracias por siempre
y bendecir tu santo nombre.
 
Amén.
 

SAN ANSELMO DE NONANTOLA.
Abad (t 803)


Nació en la ciudad de Verona en torno al año 720, era hijo de Wectari y hermano de Giseltrada, la esposa del rey Astolfo. Tenia el cargo de duque de Friuli, y era, además, un rico terrateniente y estaba bien situado en la vida.

Pero él prefirió la vida religiosa. Hacia el año 749 abandona su cargo político y la vida seglar y funda en un terreno donado por el rey Astolfo el monasterio de Fanano y un hospicio para peregrinos, llamado de San Jacopo del Val d'Amola, en el que los atiende con gran caridad. Se trataba de una tierra de paso por donde los peregrinos transitaban en gran número y se hizo famosa la acogida amorosa que en el dicho hospicio se les brindaba.


Tras la toma de Rávena por Astolfo en 750, éste le dona el terreno donde edifica Anselmo el monasterio de Nonantola. Aquí él y sus monjes se ponen a trabajar de forma que todo el terreno se vuelva feraz y signifique un despegue económico de la zona.
 
Creó otros tres monasterios dependientes de Nonantola, siendo más de mil los monjes que integraban aquella federación de monasterios. En todos ellos se llevó adelante una gran labor tanto en los campos como en los escritorios, transcribiendo códices, y acogiendo con mucha caridad a los transeúntes.
 
Desterrado a Montecassino unos años por causas no del todo claras, se preocupó de adquirir códices para su monasterio, al que pudo volver a la muerte del rey Desiderio.
 
En la guerra franco-lombarda procuró ser agente de paz. Sin duda por ello Carlomagno favoreció a Anselmo y a su monasterio.
 
Murió el 3 de marzo de 803.


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